Er seporturero

OriginalCastellano
Autor: José María De Benito, ‘Xema’
Idioma: Andaluz
Norma: PAO-UNIFICADA
Er seporturero

Sobre’r zimenterio la yubía cae
gorpeando con juerza lah tumbah
i en er plomizo zielo anubao
loh enfurezíoh rayoh relumbran.

Lah coloríah palomitah con arborozo
por entre loh lirioh ya no rebolotean
porque a la berita’e lah mojosah nixerah
p’acobijarse tomaron la berea.

Empapaíto perdío d’arriba abajo
i arreziíto jahta la mehmita mérula
en la faneguiya sin zesâ currela
er seporturero entre lah brabíah ésulah.

¡I en de mientrah, la pala,
jorando la tierra n’er biento resuena!

Sin buya denguna i gahtando cudiao
un prefundo joyo n’er barro ér caba
p’asín dina seportura poê otorgalle
a quien polah cayeh anteh mendingaba.

I en esa úmea fosa sin nombre:
ehblanquío, abutagao i jeriondo;
el inerte cuerpito’er bagamundo
a ehcurah reposa’n lo jondo.

Abiendo arrematao la faena
er seporturero suerta la pala
cabilando’n que su brebe bía
poquita poco se l’ehcapaba.

¡I en de mientrah, la Pelona,
aziguatando’n silenzio permaneze a l’ahpera!

Autor: José María De Benito, ‘Xema’
Adaptación: José María De Benito, ‘Xema’
Idioma: Castellano
El sepulturero

Sobre el cementerio la lluvía cae
golpeando con fuerza las tumbas
y en el plúmbeo cielo nubloso
los enfurecidos rayos relumbran.

Las coloridas mariposas con alborozo
por entre los lirios ya no revolotean
porque al costado de los mohosos nichos
para cobijarse tomaron la vereda.

Sumamente empapado de arriba abajo
y congelado hasta la misma médula
en el camposanto sin cesar trabaja
el sepulturero entre las bravías ésulas.

¡Y mientras tanto, la pala,
horadando la tierra en el viento resuena!

Sin prisa ninguna y teniendo cuidado
un profundo hoyo en el barro él cava
para así digna sepultura poder otorgarle
a quien por las calles antes mendigaba.

Y en esa húmeda fosa sin nombre:
pálido, abotagado y hediondo;
el inerte cuerpo del vagabundo
a oscuras reposa en el fondo.

Habiendo terminado la faena
el sepulturero suelta la pala
cavilando en que su breve vida
poco a poco se le escapaba.

¡Y mientras tanto, la Muerte,
acechando en silencio permanece a la espera!

Gravedigger de Josef Mánes (1843)